La inteligencia artificial avanza a un ritmo vertiginoso y redefine procesos, costos y estructuras laborales. En ese contexto, algunas empresas consideran reducir o reemplazar puestos iniciales con tecnología. Sin embargo, una opinión surgida desde uno de los actores más poderosos del ecosistema digital reabre el debate y cuestiona si ese camino es realmente el más inteligente.
Una frase que encendió el debate
Durante una conversación pública, el director ejecutivo de Amazon Web Services sorprendió al calificar como un grave error la idea de sustituir a empleados junior con inteligencia artificial. En el podcast Matthew Berman, Matt Garman relató una anécdota que resume su postura.
Según contó, en una reunión de liderazgo escuchó propuestas que apuntaban a reemplazar a los trabajadores más jóvenes gracias a los avances de la IA. Su reacción fue inmediata y contundente: consideró esa estrategia como una de las decisiones más equivocadas que había oído. Más allá del tono, el mensaje dejó claro que el debate no es solo tecnológico, sino profundamente humano y estratégico.
Por qué los empleados junior siguen siendo clave
Garman sostiene que los perfiles junior cumplen un rol fundamental en las organizaciones tecnológicas. No solo representan una parte más accesible de la estructura de costos, sino que suelen ser los usuarios más intensivos de las herramientas de inteligencia artificial. Son quienes experimentan, prueban y adoptan con mayor rapidez nuevas soluciones.
Eliminar ese escalón inicial, advierte, podría generar un vacío peligroso. Sin una base de profesionales en formación, las compañías corren el riesgo de quedarse sin talento experimentado en el futuro. La automatización, en ese sentido, no reemplaza el aprendizaje progresivo ni la transferencia de conocimientos que se produce con el tiempo.
Formación, experiencia y visión de largo plazo
El directivo cuestionó la sostenibilidad de un modelo que prioriza la eficiencia inmediata por sobre el desarrollo de personas. Desde su perspectiva, dejar de contratar graduados hoy implica hipotecar la capacidad de innovación mañana. El software, la resolución de problemas complejos y las buenas prácticas no se adquieren de un día para otro, ni pueden delegarse por completo en sistemas automatizados.
Garman insistió en que las empresas deben seguir ofreciendo oportunidades a los jóvenes para aprender y crecer dentro de la industria. En un entorno marcado por la IA, las habilidades más valiosas no se limitan a un título específico, sino que incluyen el razonamiento crítico, la creatividad y la capacidad de adaptación.

El contexto: desempleo juvenil y automatización
El debate se intensifica en un momento delicado para el empleo joven en tecnología. Datos recientes de Goldman Sachs muestran que la tasa de desempleo entre personas de 20 a 30 años en el sector ha aumentado de forma significativa desde comienzos de 2024, superando el incremento del desempleo general en Estados Unidos.
Además, el economista jefe de la firma, Jan Hatzius, proyectó que la inteligencia artificial generativa podría desplazar entre el 6% y el 7% del total de trabajadores estadounidenses en los próximos años. Estas cifras alimentan la preocupación sobre cómo impactará la tecnología en quienes recién comienzan su carrera.
Voces divididas dentro de la industria
La postura de Garman no es la única en el sector, pero tampoco es unánime. Thomas Dohmke, por ejemplo, defendió recientemente el valor de los ingenieros jóvenes. Según explicó, suelen aportar miradas frescas y, en muchos casos, han sido los primeros en integrar la inteligencia artificial en su trabajo cotidiano.
Dohmke destacó que las nuevas generaciones, desde estudiantes de secundaria hasta universitarios, adoptan estas herramientas con rapidez gracias a su mentalidad abierta y a una menor resistencia al cambio. Para él, ese entusiasmo resulta clave para empujar la innovación.
En el extremo opuesto, Jeff Dean afirmó a principios de 2025 que la inteligencia artificial pronto podría replicar las habilidades de un ingeniero de software junior. Según sus estimaciones, esa capacidad podría volverse realidad en un plazo sorprendentemente corto, lo que reaviva la discusión sobre la reemplazabilidad de estos perfiles.
Una discusión que recién empieza
La advertencia del CEO de Amazon Web Services pone sobre la mesa una tensión central del presente tecnológico: cómo equilibrar automatización y desarrollo humano. La inteligencia artificial promete eficiencia y escala, pero el capital humano sigue siendo el motor que transforma herramientas en innovación real.
El futuro del empleo juvenil en tecnología no está escrito. Lo que sí parece claro es que las decisiones tomadas hoy definirán si la industria construye un ecosistema sostenible, con talento formado y experiencia acumulada, o si sacrifica su base humana en nombre de una eficiencia de corto plazo.
[Fuente: Infobae]