Nvidia invertirá 5.000 millones de dólares en Intel para dar forma a una nueva era de procesadores que integren CPU y GPU en un mismo chip. La idea es unir la experiencia de Intel en microarquitectura x86 con la potencia gráfica de Nvidia. Sin embargo, no existen plazos concretos: un portavoz de Intel admitió que no hay calendarios de producto definidos, y analistas estiman que los primeros chips podrían tardar dos o tres años en llegar.
La asociación también llega en un contexto político y financiero particular. Tras la inyección de 11.000 millones de dólares del Gobierno de EE. UU. a Intel, Nvidia insiste en que la Casa Blanca “no tuvo ninguna participación en este acuerdo”.
¿Un futuro para portátiles más potentes y ligeros?
El atractivo está claro: notebooks con gráficos y procesador integrados que reduzcan costos, peso y consumo de batería, evitando depender de portátiles gaming caros con GPU dedicadas. Según Jensen Huang, CEO de Nvidia, el objetivo es “atender a la mayoría del mercado de portátiles de consumo”. Pero todavía no está claro cómo competirán estas soluciones con la propuesta de AMD, que ya combina CPU y GPU en sus APU.
La hoja de ruta de Nvidia no cambia: seguirá comprometida con su proyecto de CPU basadas en ARM, que ahora apunta a 2026. Mientras tanto, Intel prevé lanzar sus chips móviles Panther Lake, y se rumorea que Nvidia prepara nuevas gráficas “Super” para principios de 2026.
¿Qué pasará con las GPUs actuales?
El acuerdo genera dudas sobre el futuro de las líneas actuales. Intel asegura que seguirá desarrollando su gama Arc, tras las gráficas Battlemage, competitivas en la gama media. Nvidia, por su parte, no aclara si sus GPUs de escritorio seguirán siendo prioridad, en un momento en que gran parte de sus ingresos provienen de chips de IA para centros de datos.
El riesgo es que la alianza lleve a ambas compañías a centrarse más en chips móviles integrados y menos en ofrecer variedad de opciones de GPU. Y si bien AMD ha ganado terreno en consolas y APUs para gaming, la competencia sigue siendo crucial para los consumidores de PC. El futuro dependerá de si este acuerdo impulsa la innovación… o si abre la puerta a un retroceso en la diversidad de productos disponibles.
Este artículo ha sido traducido de Gizmodo US por Romina Fabbretti. Aquí podrás encontrar la versión original.