¿Ventana o pasillo? Lo que tu preferencia revela acerca de tu personalidad

Los que quieren ventana no tienen muy buena prensa:

"A los pasajeros que prefieren ventana les gusta tener el control y tienden a tener una actitud hacia la vida de sálvese quien pueda, además de ser más fácilmente irritables", explica al periódico británico The Telegraph la doctora Becky Spelman, jefa de psicología en la clínica Harley Street.

Además, "les gusta acurrucarse y prefieren existir en su propia burbuja", añade.

Otras características de estos individuos es que son más egoístas, tienen menos ansiedad y tienden a ser viajeros frecuentes que han desarrollado cierta confianza para molestar a otros, prosigue la experta.

Sin embargo, lo que no cuenta Spelman es que también cabe la posibilidad de que se trate de personas más tímidas.

"Quien elige ventanilla es una persona habitualmente más introvertida, que prefiere distraerse contemplando el paisaje o incluso dormitar", cuenta a Traveler.es la psicóloga Begoña Albalat.

"Disfruta del trayecto estando a solas, de su música, su libro, sus redes sociales en las que quizá comparta imágenes que ve a través de la ventana", explica.

"Sería la posición ideal también para alguien que está volando porque va a trabajar, ya que puede dedicar tiempo de vuelo a su ordenador sin verse interrumpido por gente pasando constamente por delante y distrayendo su atención de la tarea", continúa.

Y si elegis pasillo:

"Quienes vuelan en pasillo suelen ser personas más sociables y, definitivamente, más receptivas. También es probable que sean viajeros más inquietos y a quienes les guste menos dormir en los aviones", señala Spelman, en un argumentario con el que Albalat coincide esta vez.

"Quien elige pasillo es normalmente una persona más extrovertida, que no necesariamente quiere aprovechar el vuelo para dormir y prefiere disfrutar de entretenerse observando e interactuando con otros en lugar de apartarse", confirma.

"Le gusta la gente, verla pasar, ser consciente de quién hay a su alrededor. Se trata de un individuo más inquieto socialmente y, probablemente, más inquieto en general. Para esta persona, el vuelo ya forma parte del viaje, no es un mero medio de transporte", defiende la profesional española.