Lunes, 12 de Agosto de 2019

Una perrita de refugio nace con el bigote de Salvador Dalí y las redes estallan

Se llama Dolly en honor al pintor español del del siglo XX, considerado uno de los maximos representantes del surrealismo

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La diferencia de esta historia está en que esta vez no sobresale una situación triste, pues la tristeza de la familia quedo en la calle, en ese lugar en el que antes vivieron pero el que nunca más volverán a ver como un lugar apto para vivir, sino como un lugar para pasear y divertirse.

Esta historia muestra la belleza, la ternura, la diversidad y el amor que pueden reflejar los animalitos, principalmente los cachorros, aquellos peluditos bebés que hacen que se derrita nuestro corazón, pues estos no logran soportar tanto amor.

Ella es Dolly, una perrita a los que todos relacionaron con el difunto pero muy recordado pintor Salvador Dalí, pues el bigote que tiene en su carita es muy particular, llamativo y semejante al del pintor, por eso también su nombre.

 

Dolly fue rescata de la calle  junto a su mamá y sus 10 hermanitos por el refugio Hearts & Bones Rescue, allí pasaron sus primeras semanas, recuperándose del frío y del hambre que habían vivido, recibieron cuidados, cariño, una cómoda y calientita camita, platitos llenos de comida y halagos, muchos halagos, pues todos eran preciosos, no sólo la versión canina femenina de Dalí.

Posteriormente, después de varios días de recuperación para la familia, fueron llevados a un hogar de paso en Dallas, pues el refugio consideraba que estarían más cómodos y mejor atendidos en una casa de familia, pues lamentablemente ellos tienen siempre muchos animalitos y no pueden sostenerlos a todos, además, el hecho de tener tantos, hace que existan enfermedades en el lugar, enfermedades a las que son más propensos los peluditos de corta edad.

 

Toda la familia canina se ve muy feliz y agradecida con la familia que los acogió, pues cada vez que ven a sus rescatistas, saltan alegremente con el fin de saludarlos y manifestarles cuan felices están de verlos, además, llenan sus rostros con babosos besos.

Las personas a cargo monitorean a cada cachorro, no tiene diferencias, si bien aceptan que Dolly es toda una dulzura, se encargan de que todos los bebés se sientan amados, también la mamá, a la que alimentan muy bien y le brindan espacios para ella sola, pues tiene un pesado trabajo con los bebés, por lo que la familia le ofrece espacios de descanso y diversión solo para ella.

 

 

 


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