Día del mate: la historia y los secretos de la mayor costumbre argentinaEl día conmemora el nacimiento de Andrés Guacurarí y Artigas, a fin de promover nuestras costumbres y recordar a aquél que luchó en nuestra independencia.
Este día nos recuerda a una, y por no decir la mayor, costumbre argentina, el mate. Se trata de una infusión muy conocida, popular en todo nivel social y que tiene su origen en nuestros pueblos originarios, más propiamente, los Guaraníes y Guaycurúes, dispersos en el alto Paraná y alto Uruguay. Con la conquista el hábito fue adoptado por los españoles y fue muy apreciada por la compañía de Jesús o misiones jesuíticas (llamada, también, “yerba de los Jesuitas”). El nombre “mate” (del Quechua, “mati ”: calabacita), proviene de la calabaza en la cual se prepara dicha infusión. En su interior se coloca la yerba mate (Ilex Paraguariensis), ligeramente tostada y desmenuzada, para tal fin. Luego, se agrega el agua proveniente de la “pava” o caldera, a una temperatura de 80ºC; así, se obtiene una preparación espumosa de sabor propio, que se succionará a través de un canuto o bombilla. El mate, para los argentinos, no trata sólo de una infusión, sino de un culto que al estar con amigos, pareja, familia, invita a la charla, a la reflexión, al debate: “¿Preparamos unos mates?”, la manera que tienen los argentinos para decir, “quiero pasar un rato con vos”. El consumo puede darse también de manera individual, el cuál acompaña y constituye un paliativo a la soledad, mientras se hacen otras tareas. Con respecto a su contenido, este posee cafeína (0,2% a 1,6%), del grupo químico de las Xantinas, sustancias estimulantes del sistema nervioso central, y un 10% de tanino (de acción astringente y que le da su sabor amargo). Al igual que otras bebidas caféicas (café, té, cola, guaraná, cacao) no generan adicción, pero si, habituación. Volver a Actualizarte |
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